viernes, 22 de octubre de 2010

¡Qué valiente!

Me pide apoyo pero estoy bloqueada y a años luz tratando de digerir esta situación que se me hace bola, que se me atraganta. Admiro y aprendo de su generosidad, me pregunto si seré capaz de serlo yo tanto, mientras me pregunto es posible que se haga demasiado tarde tic-tac tic-tac. En las situaciones difíciles es cuando conocemos a quién tenemos al lado - me dice. Me debo estar retratando, con un seis y un cuatro. No puedo parar de pensar tantas cosas, todas una y otra vez, una y otra vez, del derecho y del revés, total para qué, no son más que pensamientos pescadilla. Ahora lo primero es lo primero, que también es lo más importante, esa es la bola que de momento no me pasa de la garganta. Me meto prisa para reaccionar pero cuanto más rápido quiero más me desbordo y más lenta voy, ahora hago que estoy bien, que todo está bien que lo voy asimilando pero al rato bajo el telón, así no estoy ayudando nada . En la falta de madurez ahora sí que es patente la diferencia de edad- o al revés, o es que ser cuadriculada con todos los esquemas rotos tiene su aquel y peras no doy.
Me quito de en medio unos días.
¡Qué valiente!.

jueves, 14 de octubre de 2010

La vida de los otros.

Estoy harta de que la vida no haga más que ponernos a prueba, y cuando se salva un obstáculo y una empieza por fin a respirar a asomar la cabeza, a empezar a respirar sin que eso cueste, sin que parezcas un pez que sacan del agua, entonces como para que no te acostumbres es cuando pasa de nuevo, la vida te pone ante una situación aún más complicada ,y piensas cómo se te pudo ocurrir que eso era imposible.

Estoy muy perdida, asustada, - no sé si más lo uno que lo otro - sobrepasada, sin saber qué ni cómo hacerlo para que todo esto resulte lo mejor posible. No es que mi vida haya dado un vuelco es que la vida que tenía hasta el jueves , ya no está, se ha ido, se esfumó, ha desaparecido, y la que tengo es otra vida que no tiene nada que ver con la que tenía, con la que quería, con la que tanto costó conseguir. Ahora todo gira entorno a una situación que no sé cómo manejar, que me viene grande, - ENORME - , que me ha descolocado por completo, y que no quiero por todo lo que me asusta , aunque sé que no hay otra solución y si estuviera en la piel de ella actuaría de las misma manera y también sé que yo sí puedo elegir quedarme o irme mientras que ella no puede, ¿soy una egoísta? ¿me excuso en el miedo?, ¿sólo pienso en mí cuándo digo que no es esto lo que quiero?, ¿tengo siquiera derecho a pensar todo esto?.
La pérdida total de la independencia ante la presencia de alguien que depende de ti , alguien que tampoco quisiera estar viviendo esta vida si no la suya, si en la suya hubiera tenido unos progenitores cabales, y que no viviría ninguna si hiciesen pasar a ciertos adultos antes de echar un polvo y decidir tener un hijo por un tribunal médico que les concediera o denegara un certificado de idoneidad para ser padres, alguien inocente, sin culpa , más asustado aún que yo aún que ella y que a pesar de todo sonríe con sinceridad y mientras yo paralizada ejerciendo el derecho al pataleo sin estar al cien por cien a su lado.

martes, 5 de octubre de 2010

En bucle.

He tenido un día de lo malo lo peor, creo que estoy entrando en bucle. Esta tarde en el trabajo no tenía más que ganas de llorar, lo peor de tener ganas de llorar es no poder hacerlo. Estaba sola en el trabajo porque el 50% de la plantilla está de baja, y el otro 50% somos el jefe y yo - es decir yo -, y no podía llorar porque a la gente no le puedes decir mire usted vuelva dentro de 15 minutos o media hora, o no sé cuánto tiempo, porque resulta que estoy sola y tengo unas ganas terribles de llorar - así de repente del puro cansancio- , no de que me cuente que le pasa o le deja de pasar, vamos que me trae al pairo que le duele o le deja de doler y lo que quiere es lo que sea que están anunciando en la tele que va al foco del dolor que según me cuenta es nuevo y lleva en el mercado lo que no está escrito, o si hace usted de vientre que no pasa nada porque no obre - por decirlo finamente - un día, o si tiene flatulencia que por otro lado es normal con esa cara como al borde del eructo, o si quiere una crema que le quite las arrugas y de momento los milagros..., o unos preservativos de sabores aunque esto siempre me resulta más grato, o se inventa usted el nombre de lo que toma para lo que sea que no sabe ni para qué lo toma y entonces hay que jugar al adivina adivinanza, o quiere usted que le solucione todas sus neuras y yo no pueda decirle que es usted algo obsesivo y donde tiene que ir es a otro sitio, o si le pregunto que si en comprimidos me contesta que no, que en pastillas, que en comprimidos no, o le tengo que explicar que es efervescente - precisamente lo que usted no es- , o no sabe dónde se tiene que poner la crema para las hemorroides que le recetaron ¿qué le pasaba a usted cuando fue al médico? y un largo etcétera...Así que me tuve que tragar las lágrimas y salir unas pocas veces con los ojos al borde de la inundación, y achicar agua otras pocas veces con algún colirio de esos que te piden de la siguiente manera:
- Quiero un colirio.
- ¿Para qué? - no alargo más la pregunta intencionadamente para saber quién tengo enfrente.
- Para los ojos - suelen contestar casi saltándoseles de las órbitas.
¿Acaso pregunté en qué parte de su ignorante anatomía lo iba a a aplicar?.
Y así estoy.

sábado, 2 de octubre de 2010

El descanso de.

Escribo mientras espero a que termine la lavadora, - el pronóstico del tiempo dice que lloverá y en esta ciudad con río la única misión imposible es secar la ropa cuando empiezan las lluvias-, el televisor de fondo, sonidos-voces que puedo escuchar o dejar de hacerlo a golpe de mando, fumo un cigarro detrás de otro compulsivamente, no sé de qué me sirve conseguir pasar el día habiendo fumado un solo cigarro cuando por la noche rompo todo propósito. No tengo energía para preparar nada para cenar además la nevera está tiritando demasiado frió para tanto vacío, y ni se me ocurre qué, otra noche más dará lo mismo. Las piernas-lastres después de tantas horas de pie, los tobillos se me han perdido a lo largo del día o no sé si las rodillas se han desplazado a esa altura, me da miedo que se me luxe una rótula en esa su nueva ubicación. Es posible que la nicotina aplaque el hambre, pensé cuando venía a casa en pedir comida china u otra pizza pero realmente no me apetecía ni descolgar el teléfono, sólo quería llegar y poder decidir cuando suenan o dejan de sonar las voces anodinas, sólo pensé que no estaría mal que eso se pudiera hacer y de poder ser así es seguro que hoy hubiera agotado las pilas del mando.
Mañana más que hasta el viernes que viene no encontraré mis tobillos, eso también es la vida aunque es la parte que menos me gusta.
Tengo que tender.